La DANA ha dejado prácticamente sin mandarina a Valencia, principal productora, mientras que la naranja de Sevilla se recogerá más tarde, lo que paralizará el mercado de cítricos, según Asaja-Sevilla.
Las lluvias de los últimos días, que dejaron un rastro de desolación y tragedia en Valencia y zonas de Castilla-La Mancha y Andalucía -donde se han producido más de 1.000 rescates y que ha afectado especialmente a las provincias de Almería, Cádiz y Málaga, donde falleció el miércoles un hombre de 71 años- han cambiado los pronósticos de una campaña fundamental para el campo sevillano: la de los cítricos y, especialmente, la naranja.
Si bien estaba previsto que esta misma semana comenzaran a recogerse las fincas más adelantadas, esta cuestión se va a ver retrasada hasta que deje de llover de manera definitiva y la tierra haya oreado, indican a este periódico fuentes de Asaja-Sevilla.
Desastre para la mandarina valenciana
Hay que tener en cuenta que la campaña de la mandarina, más temprana y que se produce en su mayoría en el Levante español -el 80% de las que se venden actualmente en los mercados proceden de esta zona, mientras que el 15% llega de Huelva y el 5% restante de Sevilla- se ha visto mermada.
Los datos de COAG apuntan a que el 100% de la prevista por recoger en Valencia se ha perdido por la DANA que provocó decenas de muertes en esta provincia española y que se llevó por delante los cultivos, así como provocó daños materiales que tardarán mucho en reconstruirse.
En el caso de la provincia sevillana, estas últimas lluvias dejan en el aire el aforo previsto en septiembre. De cualquier modo, en Asaja-Sevilla valoran que el agua caída «podría ser positiva» para la campaña de naranja sevillana.
Aforos previstos antes de la DANA
La Consejería de Agricultura de la Junta de Andalucía presentó en septiembre su aforo de la producción de cítricos de la campaña 2024-2025, en el que se prevé que la producción de estos cultivos superará los 2,26 millones de toneladas en la región durante dicha campaña.
Se espera, por tanto, una recuperación de cosecha respecto a la campaña anterior como consecuencia del aumento de las precipitaciones en primavera y las dotaciones de riego, que han mejorado notablemente el estado vegetativo de las plantaciones.
En este sentido, la Junta destacó que a nivel andaluz esta estimación supone un aumento de un 19,2 por ciento con respecto a la campaña 2023-2024 y un 3% respecto a la media de las últimas cuatro campañas.
En el caso nacional, el Ministerio de Agricultura, Pesca y Alimentación preveía un aforo inicial de producción citrícola en España de 5,8 millones de toneladas para la campaña 2024/2025. En concreto, la previsión para la naranja era cercana a los tres millones, un 8,8% más que la temporada anterior, aunque por debajo de la media en algo más del 8%. Estas cifras, tras el desastre de Valencia, quedan ahora en el aire.
Ahora, «el aforo y las previsiones se pueden tirar a la papelera, los números van a depender de muchas cosas tras las lluvias, porque Valencia, que tenía ya pronosticada la cosecha corta, va a ser más corta incluso por la DANA», subrayan las mismas fuentes.
En cualquier caso, y aunque pueda ser una buena campaña para Sevilla en lo que se refiere a la naranja, Asaja-Sevilla destaca que «todo lo que pasa en el Levante nos afecta de manera directa: de entrada, la paralización del mercado, que hará que aumenten los precios».
Necesidad de una Interprofesional
Entre las cuestiones pendientes del sector, más allá de lo que termine pasando con esta campaña, está la formalización de una Interprofesional andaluza que aúne todos los esfuerzos y que sirva además para alentar y promocionar el consumo de cítricos, que ha bajado de manera considerable en los hogares españoles en los últimos años.
Según ponen de manifiesto los datos del panel de consumo alimentario del Ministerio de Agricultura, el consumo de naranja en los hogares ha pasado de los más de 21 kilos por persona al año de 2013 a los 11,88 que se registraron en 2023. «No llegamos ni a un kilo por persona y mes», lamentan en Asaja-Andalucía.
En el caso de la comunidad andaluza, el descenso es aún mayor. Los andaluces consumen 10,82 kilos de naranjas por persona y año. Poco más de 900 gramos por persona y mes.»Es muy difícil de entender este retroceso cuando los españoles en general, y los andaluces en particular, cuentan con la mejor naranja del mundo de kilómetro cero y cuando en todas las encuestas de opinión la preocupación por la salud y la nutrición ocupa hoy en día un lugar preeminente», subrayan desde la organización agraria.
Fuente: elcorreoweb.es