Los ministros de Agricultura de la UE dieron ayer su visto bueno a una trascendental reforma del mercado de frutas y hortalizas que aproximará el sector a las condiciones de ayudas desvinculadas de la producción que ya rigen en la mayor parte de la Política Agrícola Común (PAC).Como principal novedad con respecto a las ofertas previas de la presidencia de turno de la UE -Alemania- y de la Comisión para esta nueva Organización Común de Mercado (OCM) el acuerdo establece unos periodos transitorios más generosos que los previstos que permitirán a los agricultores adaptarse a las nuevas circunstancias con mayor comodidad. En el caso del tomate ese periodo transitorio será de cuatro años. En su transcurso será posible que la mitad de las ayudas que reciba el sector por este concepto estén vinculadas aún a la producción.

El resto de los cultivos salvo los cítricos contarán con seis años de adaptación. Durante los cuatro primeros se podrá vincular las ayudas con la producción hasta en un 100% mientras que en los dos restantes el porcentaje caerá a la mitad.

Finalmente los cítricos gozarán también de seis años de periodo transitorio en los que la única diferencia con los restantes cultivos para fresco será el porcentaje de acoplamiento de la ayuda a la producción previsto para los dos últimos años que será del 75%.

Las organizaciones de productores asumirán un mayor protagonismo con la reforma al flexibilizar su acción y simplificar sus reglas. En aquellas zonas en las que la producción gestionada a través de ellas es menor del 20% la cofinanciación comunitaria podrá alcanzar el 60% diez puntos más que hasta ahora.

Retirada de producción
Esas asociaciones serán también las responsables de gestionar los nuevos mecanismos de crisis con una financiación comunitaria de hasta el 50%. Destaca entre ellos la posibilidad de retirar la producción en el campo y no una vez alcanzada la cadena de distribución. Las retiradas para distribución gratuita en escuelas serán financiadas en su totalidad por el presupuesto comunitario. Las ayudas a las organizaciones de productores se mantendrán en el 4 1% pero podrán aumentar hasta el 4 6% una vez probado que la diferencia se utiliza sólo en prevención de crisis y gestión.

La ministra de Agricultura Elena Espinosa se congratuló del acuerdo. «Respeta todos los objetivos que nos habíamos marcado y nos va a permitir mejorar la competitividad del sector el más importante de toda la UE» declaró. Por el contrario el PP del Parlamento europeo criticó el pacto que juzgó muy lesivo para los cítricos españoles que a su juicio son discriminados frente a los de Italia y Grecia.

por FERNANDO PESCADOR Bruselas