Las sanciones económicas impuestas a Rusia limitarán el consumo y provocarán graves trastornos en los pagos.
Los exportadores argentinos de frutas se están preparando para grandes pérdidas a raíz de la invasión rusa de Ucrania.
Como principal destino de manzanas, peras y limones, cualquier interrupción de los envíos a Rusia tendrá graves consecuencias financieras para los productores, que ya se enfrentan a una presión sin precedentes por el aumento vertiginoso de los costes de producción y logística.
Si bien Argentina aún no se ha adherido a las sanciones económicas impuestas por gran parte de Occidente, la devaluación del rublo afectará el poder adquisitivo de los consumidores y reducirá los ingresos que reciben los productores por su fruta.
La expulsión de Rusia del sistema SWIFT y la escasez de divisas complicarán y retrasarán los pagos, dejando a los productores enfrentando mayores costos financieros.
Según La Nación , una fuente cercana al ministro de Agricultura, Julián Domínguez, habría señalado que el gobierno no tiene planes de introducir medidas restrictivas al comercio bilateral.
Mientras tanto, los productores de limón de la provincia de Tucumán han decidido retrasar el inicio de la cosecha de 2022 debido a la creciente incertidumbre por el conflicto en Ucrania.
Rusia y Ucrania absorben alrededor del 25 por ciento del volumen total de exportación de Argentina, que prácticamente en su totalidad proviene de Tucumán, con envíos que oscilan entre 40.000 y 50.000 toneladas por año.
Ámbito informó que el gobernador de Tucumán, Osvaldo Jaldo, se reunió este jueves con Pablo Padilla, presidente de la Asociación de Cítricos del Noroeste Argentino (ACNOA), para coordinar acciones que permitan mitigar las implicaciones logísticas y financieras que se esperan de la crisis.
Según el ministro de Desarrollo Productivo de Tucumán, Simón Padrós, el 50 por ciento de las divisas que ingresan a la provincia provienen de la exportación de limones y sus derivados.
Antes de la reunión, Padilla anunció que la cosecha de este año se retrasaría y se emplearía menos gente para recoger la fruta.
“Tenemos un crecimiento de costos insostenible. El costo de los fertilizantes ha aumentado en un 100 por ciento. El flete marítimo también ha aumentado. Y ahora nos enfrentamos a un alza en el precio del gas. No sabemos si habrá suficiente gasolina y es fundamental”, dijo Padilla a Radio Tucumán .
Jaldo dijo que el gobierno nacional y provincial trabajará en conjunto con los productores para encontrar soluciones a los desafíos que enfrentan los productores y exportadores.
A principios de esta semana, la Asociación de Exportadores de Fruta Fresca del Hemisferio Sur (SHAFFE) informó que Sudáfrica y Argentina se verían particularmente afectados por el conflicto, ya que son los principales proveedores de productos frescos a Rusia.
SHAFFE advirtió que desviar el exceso de oferta de cítricos, manzanas y peras a otros mercados como la Unión Europea y EE. UU. “podría dar lugar a un exceso de oferta de esos mercados con las consiguientes pérdidas económicas para los exportadores”.
Fuente: fruitnet.com
