Campaña 2006: Desorden varietal y rentabilidad citrícola

Los datos correspondientes a la predicción productiva para la campaña citrícola 2006/07 así como aquellos otros que hacen referencia a la evolución de la cosecha durante la última década han vuelto a poner sobre el tapete una cuestión tan esencial para el buen funcionamiento del negocio naranjero como es su estructura varietal.Desafortunadamente estos últimos informes corroboran que el mapa varietal de la citricultura valenciana presenta no pocos desequilibrios que influyen y de qué modo en el rendimiento económico.

UN CAMBIO DE TENDENCIA
Hace ya tres temporadas la producción de mandarinas superó por primera vez en la historia y rompiendo una larga tradición a la de naranjas. En los años previos a este cambio los productores animados por los buenos precios que se pagaban por las entonces novedosas variedades extratempranas se lanzaron a replantar sus huertos con ese tipo de mandarinas. Cuando las nuevas plantaciones comenzaron a dar sus frutos y los mercados se vieron forzosamente inundados en esos meses iniciales de la campaña por semejante avalancha se produjo lo que ocurre siempre en estos casos: el colapso el hundimiento de los precios las lamentaciones y la furia. A lo largo de los últimos cursos esta misma situación ha vuelto a repetirse en los primeros compases del ejercicio y ha incidido siempre para mal en el posterior desarrollo del mismo. El desorden varietal no es la única causa de los problemas que sufre el sector pero sin duda influye. Para la temporada que ahora arranca las previsiones oficiales de la Conselleria de Agricultura indican que la producción global de mandarina aunque sigue superando a la de naranja caerá un 6 1% respecto al curso 2004/05 que es el último catalogado como normal puesto que la temporada inmediatamente anterior a la que ahora comienza no sirve de referente por estar marcada por las devastadoras consecuencias de las heladas. Pero a pesar de esa caída general la cosecha del grupo específico de mandarinas precoces sigue en aumento.

OTRO CAMBIO DE TENDENCIA
Obviamente a nadie dentro del colectivo citrícola le han pasado desapercibidos los efectos de la sobreproducción de mandarina temprana así que la tendencia de los nuevos tiempos tal como delatan las ventas de plantones y los datos oficiales es apostar de nuevo por la naranja que en los últimos años ha dado mejores rendimientos. Es la variedad lane late concretamente la que está llamada a convertirse en la nueva estrella del futuro y los expertos ya advierten que muy probablemente sucederá en términos de mercado lo mismo que con las mandarinas de primera estación. La historia por tanto parece condenada a repetirse.

¿QUIÉN LE PONE EL CASCABEL AL GATO?
Y si parece condenada a repetirse es porque todas estas transformaciones estratégicas se vienen haciendo desde tiempo inmemorial sin orden ni concierto sin responder a un plan previamente trazado por los rectores del sector sin planificación alguna puesto que la palabra planificación remite de inmediato a periclitadas economías de corte estatalistas que tan malos resultados han dado mientras que aquí lo que manda es la economía de mercado y la libertad de empresa y cada uno en su parcela planta lo que le viene en gana. Muy bien. De acuerdo nada que objetar. Pero el dilema sigue sin resolverse y la pregunta no admite respuestas sencillas: ¿es posible sacar cada temporada al mercado en condiciones de rentabilidad comercial mínima una producción citrícola que sólo en la Comunitat Valenciana alcanza la pasmosa cifra de casi !cuatro millones de toneladas! o lo que es lo mismo !cuatro mil millones de kilos!? sin que alguien -¿quizá el propio sector a través de Intercitrus? ¿quizá la Conselleria de Agricultura?- ordene mínimamente una cuestión tan compleja y a la vez necesaria como es la estructura varietal como es en suma determinar las cantidades de fruta de los diferentes tipos y familias citrícolas que los mercados pueden absorber con un mínimo de garantías de rentabilidad?. ¿Es posible hacerlo? ¿hay alguien en casa?

fuente: Sergio Carbó Valencia

2006-09-26T00:00:00-03:00

Campaña 2006: Desorden varietal y rentabilidad citrícola

Los datos correspondientes a la predicción productiva para la campaña citrícola 2006/07 así como aquellos otros que hacen referencia a la evolución de la cosecha durante la última década han vuelto a poner sobre el tapete una cuestión tan esencial para el buen funcionamiento del negocio naranjero como es su estructura varietal.Desafortunadamente estos últimos informes corroboran que el mapa varietal de la citricultura valenciana presenta no pocos desequilibrios que influyen y de qué modo en el rendimiento económico.

UN CAMBIO DE TENDENCIA
Hace ya tres temporadas la producción de mandarinas superó por primera vez en la historia y rompiendo una larga tradición a la de naranjas. En los años previos a este cambio los productores animados por los buenos precios que se pagaban por las entonces novedosas variedades extratempranas se lanzaron a replantar sus huertos con ese tipo de mandarinas. Cuando las nuevas plantaciones comenzaron a dar sus frutos y los mercados se vieron forzosamente inundados en esos meses iniciales de la campaña por semejante avalancha se produjo lo que ocurre siempre en estos casos: el colapso el hundimiento de los precios las lamentaciones y la furia. A lo largo de los últimos cursos esta misma situación ha vuelto a repetirse en los primeros compases del ejercicio y ha incidido siempre para mal en el posterior desarrollo del mismo. El desorden varietal no es la única causa de los problemas que sufre el sector pero sin duda influye. Para la temporada que ahora arranca las previsiones oficiales de la Conselleria de Agricultura indican que la producción global de mandarina aunque sigue superando a la de naranja caerá un 6 1% respecto al curso 2004/05 que es el último catalogado como normal puesto que la temporada inmediatamente anterior a la que ahora comienza no sirve de referente por estar marcada por las devastadoras consecuencias de las heladas. Pero a pesar de esa caída general la cosecha del grupo específico de mandarinas precoces sigue en aumento.

OTRO CAMBIO DE TENDENCIA
Obviamente a nadie dentro del colectivo citrícola le han pasado desapercibidos los efectos de la sobreproducción de mandarina temprana así que la tendencia de los nuevos tiempos tal como delatan las ventas de plantones y los datos oficiales es apostar de nuevo por la naranja que en los últimos años ha dado mejores rendimientos. Es la variedad lane late concretamente la que está llamada a convertirse en la nueva estrella del futuro y los expertos ya advierten que muy probablemente sucederá en términos de mercado lo mismo que con las mandarinas de primera estación. La historia por tanto parece condenada a repetirse.

¿QUIÉN LE PONE EL CASCABEL AL GATO?
Y si parece condenada a repetirse es porque todas estas transformaciones estratégicas se vienen haciendo desde tiempo inmemorial sin orden ni concierto sin responder a un plan previamente trazado por los rectores del sector sin planificación alguna puesto que la palabra planificación remite de inmediato a periclitadas economías de corte estatalistas que tan malos resultados han dado mientras que aquí lo que manda es la economía de mercado y la libertad de empresa y cada uno en su parcela planta lo que le viene en gana. Muy bien. De acuerdo nada que objetar. Pero el dilema sigue sin resolverse y la pregunta no admite respuestas sencillas: ¿es posible sacar cada temporada al mercado en condiciones de rentabilidad comercial mínima una producción citrícola que sólo en la Comunitat Valenciana alcanza la pasmosa cifra de casi !cuatro millones de toneladas! o lo que es lo mismo !cuatro mil millones de kilos!? sin que alguien -¿quizá el propio sector a través de Intercitrus? ¿quizá la Conselleria de Agricultura?- ordene mínimamente una cuestión tan compleja y a la vez necesaria como es la estructura varietal como es en suma determinar las cantidades de fruta de los diferentes tipos y familias citrícolas que los mercados pueden absorber con un mínimo de garantías de rentabilidad?. ¿Es posible hacerlo? ¿hay alguien en casa?

fuente: Sergio Carbó Valencia

2017-10-05T15:09:53-03:00
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