La campaña citrícola argentina tuvo un arranque positivo con las naranjas tempranas, impulsadas por una menor oferta global, aunque factores climáticos y logísticos condicionaron el desarrollo posterior. Mientras los precios iniciales favorecieron a los productores, la helada de julio redujo drásticamente el volumen de mandarinas exportables y la abundante oferta del hemisferio sur presionó las cotizaciones de las naranjas tardías.
En el caso de FAMA, el inicio de temporada fue mucho más dinámico de lo previsto. «Esperábamos exportar entre 60 y 70 contenedores de variedades como Salustiana, Newhall, Washington Navel y Midknight, pero finalmente alcanzamos más de 120. La baja disponibilidad en Estados Unidos y Brasil, junto con la reducción de envíos desde Egipto debido al mayor uso interno para concentrados, generó un escenario favorable para las tempranas argentinas», explicó Nahuel, representante de la empresa.
El panorama cambió con la llegada del invierno austral. «Una helada en julio impactó de lleno en la producción, con pérdidas cercanas al 50% en mandarinas y afectaciones también en naranjas. Ese fue el problema más grave, porque al reducirse el volumen exportable aumentan los costos unitarios y se resiente la competitividad», comentó Nahuel.
Según FAMA, «en las naranjas tardías, la fuerte presencia de Sudáfrica en los mercados internacionales coincidió con los meses de menor consumo de cítricos en el hemisferio norte, generando presión bajista en los precios. Las cotizaciones mínimas FOB se situaron alrededor de 13 dólares por caja de 15 kilos en categoría 1, con valores de 11 a 12 dólares para calidades inferiores».
Respecto a la apertura de nuevos destinos, la compañía ve oportunidades, aunque reconoce limitaciones en la conectividad marítima. «A veces llegar a ciertos mercados implica entre 50 y 70 días de tránsito, con múltiples transbordos que incrementan el riesgo y la incertidumbre», señaló.
En paralelo, FAMA avanza en diversificación varietal. Este año realizó los primeros envíos de naranjas sanguíneas Caracara, dirigidas a nichos específicos que mostraron interés. «No reemplazarán a las variedades tradicionales, pero tienen su espacio en el mercado y vamos a seguir desarrollándolas», afirmó Nahuel.
«Para la próxima campaña, la expectativa es una recuperación significativa de volúmenes. La floración observada augura una cosecha abundante, aunque la calidad aún está por definirse. Confiamos en que la mayor producción nos permita ampliar mercados y consolidar los ya existentes», añadió.
En cuanto a la gestión interna, la empresa destaca los avances en el uso de datos en tiempo real para optimizar la eficiencia. «Hoy es fundamental monitorear cada línea de empaque, los volúmenes, los descartes y los calibres, y compartir esa información con los productores para mejorar resultados. Esa administración nos permite reaccionar con rapidez en un negocio tan cambiante», concluyó Nahuel.
FAMA participará en Fruit Attraction Madrid, en el pabellón 12, stand D10, como parte de su agenda internacional del sector.
Fuente: freshplaza.es