La Unió alerta de que el aumento de precios en la campaña citrícola no compensará las rentas por el descenso de cosechas.
La Unió alertó este viernes de que el aumento de precios que se observa en la actual campaña citrícola respecto a la anterior no se verá compensado por el descenso de cosecha que hay en la mayor parte de las variedades.
La formación agraria se expresó en estos términos en un comunicado tras estudiar el informe elaborado por los servicios técnicos de la Unió con los datos de cotizaciones de la Conselleria de Agricultura y de la Lonja de Cítricos al concluir la primera parte de campaña.
En la primera parte de la campaña citrícola por ejemplo la variedad reina de las mandarinas clemenules se pagaba entre seis y diez céntimos más por kilogramo que en la pasada pero «hay que tener en cuenta que la previsión de producción para esta temporada citrícola era un 12 por ciento inferior con 589.287 toneladas aforadas» manifestó la entidad agraria.
Respecto al análisis de naranjas indicó el principal grupo es el de navelina que se pagaba al finalizar la primera parte de la campaña «únicamente» cinco céntimos por encima de la pasada pero la reducción de cosecha esperada es del 27 por ciento con 626.352 toneladas en el aforo.
La Unió también se refirió al caso del grupo de navel que se pagaba este año ocho céntimos por encima de la campaña 2008-2009 con una reducción de cosecha de un 14 por ciento; y al del limón fino se pagaba en esta primera parte de la campaña citrícola alrededor de cuatro céntimos más que en la campaña pasada pero el aforo facilitado en su día por la Conselleria de Agricultura reflejaba una disminución de cosecha del 25 por ciento.
El secretario general de la Unió Josep Botella destacó que a tenor de los datos oficiales de precios «el ligero incremento de las cotizaciones en la actual campaña citrícola sirve para tapar los malos resultados de la anterior y evitar la venta a resultas generalizada pero en ningún caso compensará las rentas como sería deseable por el descenso de cosecha que existe en la mayor parte de las variedades».
Botella incidió en que «una cosa es tener mejores precios que en la pasada campaña que fueron nefastos y otra bien distinta es pensar que la rentabilidad del citricultor ha subido porque con el descenso de cosecha se pone de manifiesto que a pesar de todo y en muchos casos se sigue perdiendo».
FUENTE: DIARIO CRITICO


