Juan Antonio, gerente de Toñifruit: “En esta nueva normalidad de cambio continuo y de volatilidad, es importante estar asociado en OPFH como Toñifruit”.

Ya el pasado mes de julio, AILIMPO confirmaba en su primera estimación de cosecha de limón Fino para la próxima campaña 2023/2024 que la producción de esta variedad anotará un importante incremento de hasta un 30% en comparación con la producción en la campaña 2022/2023. Y aunque la cosecha está sujeta a la climatología, a la disponibilidad de agua y al impacto en el volumen de cosecha de la entrada en producción de las nuevas plantaciones –como recuerda AILIMPO, la superficie de limón Fino ha aumentado en 5.671 hectáreas en los últimos 6 años–, se prevé que la cosecha nacional, que Toñifruit comenzará el próximo 1 de octubre, podría ascender a 990.000 toneladas.

“Ese aumento que se producirá en la cosecha nacional nos va a permitir dar un servicio de 12 meses espectacular a todo el mercado en el cual se hace limón español; porque además de a la Unión Europea, nuestro limón llega a todo el mundo”, señala Juan Antonio Martínez Rubio, gerente de la empresa murciana.

“A nivel de comercialización, estamos en un momento en el que todo va cambiando a la velocidad de la luz, ya sea por una pandemia o por una guerra –incluidos hasta los hábitos de consumo–, y hay que recordar que, sobre todo los agricultores pequeños, no tienen esa capacidad de adaptarse tan rápido; por eso estar asociado a una entidad como Toñifruit se vuelve tan importante en estos tiempos en que la nueva normalidad es el cambio continuo y, a nivel de mercado, hay una mayor volatilidad. Toñifruit es una OPFH que engloba actualmente a 20 socios y animamos a los agricultores a que se unan a nosotros para tener un mayor apoyo y mayor fuerza en la comercialización de su fruta”.

“Además, somos uno de los 70 socios de la organización de productores de segundo grado Anecoop, que es el mayor comercializador de frutas y hortalizas del Mediterráneo, con una facturación por encima de los mil millones de euros. Para afrontar ese cambio continuo en el sector, es muy importante estar bajo el paraguas de una organización tan social y que protege a sus agricultores como Anecoop”.

 

“El cultivo de limón en España es uno de los más sostenibles y de vanguardia que hay en el mundo”

Gracias a los esfuerzos de un sector líder en exportaciones a nivel mundial, en los últimos 30 años se ha reducido la huella hídrica del limón en España en un 38,96%, hasta ser un 57,8% inferior a la media mundial.

“La agricultura española, y más específicamente el cultivo de limón, es uno de los más sostenibles y de vanguardia que hay en el mundo”, remarca Juan Antonio, “y dando un paso más, en Toñifruti nuestra fruta cuenta con la certificación de agricultura biodinámica, con el sello Demeter, que ahora mismo está por encima de cualquier estándar de agricultura a nivel mundial”.

“La certificación Demeter engloba todas las bondades de una agricultura ecológica, es socialmente sostenible, y no solo respeta el suelo, sino que también colabora en su mejora mediante su regeneración: con ella le dejamos a nuestros hijos un suelo más rico que el que teníamos para que en el futuro no haya un planeta menos habitable, sino más sostenible”, destaca.

“Es muy importante defender al sector agrícola, porque en ocasiones es objeto de crítica. Por eso hay que recordar que en España hemos llegado a ser altamente eficientes en el consumo de agua en la agricultura, como demuestra el propio sector del limón; además, la masa vegetal de nuestras fincas reduce el proceso de desertización evitando la erosión de los suelos, y al mismo tiempo somos un importante sumidero de CO₂. Todo depende de cómo se mire: nuestras explotaciones no son solo plantaciones de limones, son auténticos bosques que, gracias a nuestra forma de cuidarlos, llegan a ser incluso más ecológicos que los bosques naturales”.

 

Fuente: freshplaza.es