En los primeros nueve meses del año las colocaciones del Valle de Río Negro y Neuquén llegaron a las 343.800 toneladas. Rusia sigue perdiendo participación sobre la oferta exportable local.

Un reciente informe elaborado por el Servicio Nacional de Sanidad y Calidad Agroalimentaria (SENASA) señala que las exportaciones de peras y manzanas en el período enero-septiembre de 2023 totalizaron las 343.800 toneladas, volumen que refleja un crecimiento interanual del orden del 24% y una caída del 5% cuando se la comprara con el promedio de las colocaciones externas consolidadas en las últimas cinco temporadas.

Distintas consultas realizadas por +P señalaban que está suba interanual registrada se debía fundamentalmente a la regularización de las exportaciones de pomáceas a Rusia, interrumpidas el año pasado con la invasión de las tropas del Kremlin a Ucrania. Sin embargo, las estadísticas no confirman estas aseveraciones.

Tal como se detalla en el gráfico adjunto, las exportaciones de peras y manzanas argentinas, sin contar aquellas destinadas al mercado ruso, alcanzaron en estos primeros nueves meses del año poco más de 286.000 toneladas, volumen que refleja un salto interanual del orden del 24% y una suba del 8% cuando se la comprara con el promedio de las colocaciones externas consolidadas en las últimas cinco temporadas.

Es decir que las exportaciones regionales mostraron un crecimiento genuino en esta última temporada. En el promedio de las últimas cinco campañas (período 2018-2022), la estadística refleja una caída en la participación relativa del mercado ruso sobre las colocaciones totales de pomáceas que salen del Valle.

Desglose por especies

Cuando se analizan las exportaciones de las dos especies mencionadas, claramente las peras mantienen su preponderancia en lo que refleja al comercio externo regional.

Las colocaciones de peras totales en los primeros nueve mese del año alcanzaron poco más de 285.600 toneladas, volumen 23% superior en términos interanuales y 4% arriba del promedio de los últimos cinco años.

En relación a las manzanas, las estadísticas del SENASA detallan que las exportaciones totalizaron en el período enero-septiembre de 2023 las 58.150 toneladas, valor que refleja un crecimiento de ventas del orden del 31% respecto del mismo período del año anterior y un derrumbe del 28% cuando se la comprara con el promedio de las colocaciones externas consolidadas en las últimas cinco temporadas.

Los datos oficiales confirman en definitiva que las exportaciones de manzanas continúan con un proceso de ajuste en su relación con el comercio exterior. Esto se da por dos causas bien definidas. La primera de ellas que existen un mercado interno importante para este tipo de producto con precios y retornos competitivos para las empresas del sector. Este contexto no se termina de dar con las peras. El otro punto, son las variedades. Los mercados externos cada día más exigen nuevas variedades en las góndolas y, sobre este punto, la oferta del Valle de Río Negro y Neuquén está muy rezagada producto de la falta de investigación, tanto pública (INTA, por dar un ejemplo) como privada. Los países del hemisferio sur y los grandes productores del norte, están muy avanzados con el trabajo de nuevas variedades. Inclusive están ampliando las fronteras de sus investigaciones a las peras, observándose ya algunas nuevas variedades de esta especie que están desplazando progresivamente a las tradicionales en los mercados del norte.

Fuente: masp.lmneuquen.com