Greening: La detección es correcta si se conocen los síntomas

La Sección Fitopatología de la EEAOC ha puesto a punto, en su laboratorio, la técnica de diagnóstico molecular de PCR que permite detectar la bacteria que causa la enfermedad del “HLB”, tanto en material vegetal como en el insecto vector.

Hasta el momento se han analizado 38 muestras de citrus, 37 de Murraya paniculata y 31 del insecto, recolectadas de diferentes quintas cítricas de las provincias del NOA. Todas dieron resultado negativo. Los síntomas que produce la bacteria no son de fácil identificación y pueden confundirse con los producidos por otras causas.

El síntoma inicial de “Huanglongbing” es una tonalidad amarilla, que aparece localizada en una o pocas ramas y que contrasta, en forma marcada, con el verde normal de la planta. Cuando la enfermedad evoluciona, se produce deficiencia de zinc, una intensa defoliación, caída de frutos y las ramas se secan. Finalmente la planta muere.

En hojas: se observan manchas verdes claras o amarillas, irregulares, asimétricas, mezcladas con el color normal de las hojas. En general no tienen un límite definido y a veces están circunscriptas por las nervaduras, las cuales, a medida que progresa la enfermedad, se aclaran, engrosan y toman un aspecto corchoso. En algunos casos se observa el denominado síntoma de “orejas de conejo”, donde puede o no observarse amarillamiento, pero las hojas toman una posición perpendicular a la rama, tiesas y se detiene su crecimiento y se engrosan. El lugar más indicado para observar síntomas en hojas son los brotes nuevos.

En frutos: se observa una detención del crecimiento, en forma asimétrica, aparecen manchas amarillas y verde claro en la cáscara. Al realizarse un corte longitudinal se observa maduración desuniforme, aumento en el espesor del albedo, oscurecimiento de la columela -en su inserción al pedúnculo- y aborto de semillas. La enfermedad afecta la calidad industrial del fruto y su sabor se torna ácido y amargo.

Floración: la planta enferma produce una floración atemporal, muy profusa y por sectores de la planta afectada por la bacteria.

fuente: la gaceta

2008-05-30T16:43:46-03:00

Greening: La detección es correcta si se conocen los síntomas

La Sección Fitopatología de la EEAOC ha puesto a punto, en su laboratorio, la técnica de diagnóstico molecular de PCR que permite detectar la bacteria que causa la enfermedad del “HLB”, tanto en material vegetal como en el insecto vector.

Hasta el momento se han analizado 38 muestras de citrus, 37 de Murraya paniculata y 31 del insecto, recolectadas de diferentes quintas cítricas de las provincias del NOA. Todas dieron resultado negativo. Los síntomas que produce la bacteria no son de fácil identificación y pueden confundirse con los producidos por otras causas.

El síntoma inicial de “Huanglongbing” es una tonalidad amarilla, que aparece localizada en una o pocas ramas y que contrasta, en forma marcada, con el verde normal de la planta. Cuando la enfermedad evoluciona, se produce deficiencia de zinc, una intensa defoliación, caída de frutos y las ramas se secan. Finalmente la planta muere.

En hojas: se observan manchas verdes claras o amarillas, irregulares, asimétricas, mezcladas con el color normal de las hojas. En general no tienen un límite definido y a veces están circunscriptas por las nervaduras, las cuales, a medida que progresa la enfermedad, se aclaran, engrosan y toman un aspecto corchoso. En algunos casos se observa el denominado síntoma de “orejas de conejo”, donde puede o no observarse amarillamiento, pero las hojas toman una posición perpendicular a la rama, tiesas y se detiene su crecimiento y se engrosan. El lugar más indicado para observar síntomas en hojas son los brotes nuevos.

En frutos: se observa una detención del crecimiento, en forma asimétrica, aparecen manchas amarillas y verde claro en la cáscara. Al realizarse un corte longitudinal se observa maduración desuniforme, aumento en el espesor del albedo, oscurecimiento de la columela -en su inserción al pedúnculo- y aborto de semillas. La enfermedad afecta la calidad industrial del fruto y su sabor se torna ácido y amargo.

Floración: la planta enferma produce una floración atemporal, muy profusa y por sectores de la planta afectada por la bacteria.

fuente: la gaceta

2017-10-09T15:49:32-03:00
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