Según alertaron desde una cámara, el dólar exportador no cierra y sin rentabilidad se pone en riesgo la inversión; el sector exporta unos US$400 millones al año.
Mientras a nivel macroeconómico hay una discusión abierta sobre si el crawlling peg del 2% mensual alcanza o hay que acelerarlo porque el tipo de cambio oficial pierde competitividad, las economías regionales de mano de obra intensiva encienden luces de alerta sobre que ya no les cierra el dólar exportador. Es el caso del sector de las peras y manzanas en el Alto Valle de Río Negro
El vicepresidente de la Cámara Argentina de Frutihorticultores Integrados (CAFI), que incluye a los productores de peras y manzanas, Germán Barzi plantea que este mes ya se perdió la competitividad alcanzada con la devaluación de diciembre: “Estamos caros en dólares, se perdió la ventaja”.
En diálogo con LA NACION, Barzi advierte que el “atraso” afecta a todas las economías regionales, en particular a las que tienen mayor componente de mano de obra, en las que los salarios se van actualizando por inflación.