Desde 2011, el yacimiento neuquino de Vaca Muerta se ha transformado en sinónimo del potencial que ofrecen las riquezas naturales en suelo patagónico. Es en esa misma provincia que la empresa Vista Alegre, a cargo de la producción, procesamiento y venta de cerezas frescas al exterior, busca potenciar sus operaciones para equiparar al competitivo mercado chileno y satisfacer la creciente demanda de este producto en Asia.
«Venimos trabajando en la apertura del protocolo fitosanitario con China desde hace cinco años. Esto nos habilitaría entrar a este gran mercado mundial, que tiene 320 millones de personas de clase media y alta y que en cinco años más va a crecer hasta 650 millones, equivalente a la población de Europa», dijo Carlos Enriquez, socio gerente de la firma frutícula, durante su paso por el programa Comunidad de Negocios, en LN+.
Hasta ahora, el país trasandino es el único oferente del hemisferio en contraestación hacia China. «Esta industria en Chile genera 100.000 puestos de trabajo en forma directa. En cinco años China va a necesitar el doble de cerezas y la Argentina tiene la oportunidad de desarrollar este producto. Por eso pensamos que va a ser un ‘Vaca Muerta’ pero con un gran impacto social y económico, porque es un recurso renovable que puede generar muchos puestos de trabajo», agregó Enriquez.
Vista Alegre, que registró ingresos por US$65 millones el año pasado y espera facturar US$280 millones en 2021, tiene en unos 60 empleados permanentes y cerca de 500 temporarios. El empresario reconoce que es difícil conseguir mano de obra: «La gente está, pero hay que volver a recrear la cultura del trabajo. Yo soy tercera generación en la fruta, nosotros incluso importamos gente de Chile. El tema es que la gente que está con planes no se vuelca al trabajo rural.»
Además, reconoce que las gestiones para ingresar por primera vez al mercado chino se aceleraron desde una reunión que tuvo con el presidente Mauricio Macri en abril. En ese sentido, sostuvo que los funcionarios del Gobierno «se han movido muy rápido» y que dos días atrás recibió la confirmación de que en septiembre llegarán al país inspectores para establecer los protocolos necesarios. «Si esto se produce, estimamos que se pueden desarrollar inversiones de US$1000 millones para la cereza», cerró el directivo.
Fuente: lanacion.com.ar