Desde hace bastante tiempo, la oferta mundial de limones es superior a la demanda. «El desequilibrio entre oferta y demanda ha creado un ciclo complejo que afecta a la rentabilidad de todo el sector», asevera Bernabé Padilla, director comercial de la División de Frutas Frescas de la empresa argentina Citromax. La reapertura del mercado estadounidense para los limones argentinos hace unos años fue una noticia importante y, si bien ofreció nuevas oportunidades de exportación, no ha aliviado mucho la presión sobre la oferta. «En cambio, ha diversificado los destinos de los limones argentinos», subraya.
Principales mercados de exportación
Los principales mercados para los limones frescos de Citromax son EE. UU. y la UE, donde se destacan países como Italia, Polonia, Grecia y Francia. Las exportaciones a estos mercados han tomado rumbos divergentes en los últimos años. «Mientras que las exportaciones a la UE han disminuido anualmente, los volúmenes destinados a Estados Unidos han tendido al alza», comparte Padilla. «Esta tendencia está estrechamente ligada a la oferta disponible cada temporada.
Para la próxima temporada de Argentina, las expectativas varían en función de los diferentes mercados. En Europa, se anticipa presión sobre los volúmenes debido a la llegada de fruta de diversos orígenes extranjeros, entre ellos Sudáfrica. Además, España es un competidor de consideración con sus limones Verna. Turquía también puede influir en el mercado en años en que el país logra extender su temporada. Más recientemente, han emergido como competidores Egipto y Zimbabue.
En EE. UU., la competencia más intensa es la de California, así como la de Chile y México. «Sin embargo, esta temporada, California podría enfrentarse a una menor producción debido a las condiciones meteorológicas, lo cual podría dar lugar a oportunidades para otros países exportadores como Argentina y Chile. Una merma en la cosecha californiana podría reducir la presión sobre la oferta, lo cual podría derivar en un escenario de oferta y demanda más equilibrado».
China es un gran consumidor de limones, pero su demanda continúa planteando dificultades a causa de la presión de la fruta cultivada en su mercado interior. Además, impone un tratamiento de frío que limita las exportaciones de Argentina a China. «El tratamiento de frío a menudo afecta negativamente la calidad de la fruta a su llegada a destino», afirma Padilla. Otros compradores de limones son Canadá, Asia y Medio Oriente, que, no obstante, se abastecen predominantemente en Sudáfrica y China.
«A pesar de la competencia, confiamos en que nuestros limones frescos se diferenciarán en el mercado. Sobresalimos en prácticas responsables, incluyendo el cumplimiento de estándares de producción, certificaciones y las mejores prácticas agrícolas y de manufactura. Seguimos comprometidos a proveer productos responsables con el medio ambiente».
Efectos de las recientes lluvias en el potencial de exportación
El inicio de la cosecha de limones de Argentina estaba programado originalmente para justo después de Semana Santa. «Sin embargo, las lluvias han provocado un retraso de al menos dos semanas, y no anticipo el envío de volúmenes significativos hasta mayo», avanza Padilla. Es difícil hacer predicciones respecto a los volúmenes de exportación debido a las abundantes lluvias caídas durante la temporada de desarrollo. Los últimos tres años se caracterizaron por primaveras secas, pero este año se registraron importantes lluvias durante octubre y noviembre. Pese a que el volumen de producción de limón se mantiene estable este año, las posibles variaciones en los rendimientos de empaque pueden influir en la fruta destinada a la exportación, dependiendo su destino final de las condiciones de cada mercado.
Fuente: freshplaza.es