Nuevos competidores y trabas financieras para los cítricos nacionales

En nuestro país comenzó la cosecha de cítricos y aparecieron algunos problemas. Entre ellos la existencia de nuevos competidores a nivel mundial.

Argentina en los meses de febrero y marzo suele importar naranjas desde España por razones estacionales y con el objetivo de completar la demanda, en ese momento abastecida con la reserva de fruta conservada en cámaras de frío. La fruta europea es de gran calidad y, hasta que se cosecha la totalidad de naranjas argentinas, ocupa las góndolas a precios más elevados. Esto último hace que los productos nacionales continúen siendo competitivos en el país.

Sin embargo, hace unos años la presencia de nuevos países exportadores con productos a precios bajos se convirtió en una preocupación para los citrícolas locales. Egipto, por ejemplo, es uno de los que enciende las alertas de las frutas argentinas porque en solo tres años se convirtió en el primer exportador mundial de naranjas frescas.

“Egipto es un competidor bravísimo y está desplazando a otros productores. No se sabe bien por qué razón tienen los precios tan bajos, pero lo que sí se sabe es que operan en condiciones que son desfavorables para los productores nacionales. Este año fueron muy pocas las cantidades que se importaron y ya no se permiten más. Pero es un mercado para tenerlo en observación porque tiene precios muy bajos. Esto de cara al futuro puede ser un problema para Argentina”, explicó a InterNos José Carbonell, presidente de Federcitrus.

A la presencia de nuevos competidores se le suma la realidad nacional. Según los citrícolas, la producción de naranjas en el país disminuyó de manera considerable en el ultimo tiempo a causa de la falta de inversión, por el quiebre de muchas empresas y por cuestiones climáticas. Pero este no es un hecho que se dé solo en la cadena de cítricos dulces. De acuerdo a lo que manifestó Carbonell, las últimas estadísticas comerciales mostraron que Argentina redujo en los últimos diez años al 50% sus volúmenes exportables de frutas en general.

“Son una suma de factores los que hacen que la competitividad se complique. Para poder exportar uno tiene que contar con buenos años climáticos que garanticen volúmenes y calidad, una enorme búsqueda de mercados e incentivo gubernamental. La falta de rentabilidad llevó a que muchos productores dejaran el sector y eso tampoco colabora. En ese marco aparecen competidores con mejores precios y buenas calidades que amenazan a nuestras frutas”, aseguró Carbonell.

Los eventos climáticos de este año fueron quizás una de las variables que más condicionaron la producción citrícola porque Argentina atravesó un 2020 con mucha sequía, lo que hizo que los volúmenes de frutas se modificaran. Si bien para los cítricos dulces se estima una cosecha 2021 similar a la del año pasado, los limones no contarán con la misma suerte. Provincias como Tucumán y Salta que atravesaron grandes heladas y una sequía que se extendió hasta fin de año tendrán consecuencias en las cantidades producidas. Pero como contrapartida, proyectan una mejor calidad de fruta.

Emergencia citrícola

La Ley de Emergencia Citrícola Nº 27.507 entró en vigencia en 2019 para las provincias de Entre Ríos, Misiones, Jujuy y Salta. La misma, benefició en términos impositivos a una gran cantidad de productores nacionales. En octubre de 2020, en medio de la pandemia, el Congreso Nacional sancionó la Ley 27.569 como prórroga de la anterior. Esta, se extendería por un año y alcanzaría también a las provincias de Buenos Aires, Tucumán y Catamarca.

Sin embargo, la última extensión nunca se reglamentó oficialmente y los productores citrícolas hasta el momento no pueden acceder a la reducción y postergación de sus aportes patronales. Para empresarios y productores esto representa un gran obstáculo debido a las importantes sumas de dinero que invierten en cada temporada y los pagos que deberán enfrentar en el caso de que la normativa no se efectivice.

Según informó José Carbonell, desde el sector están llevando a cabo las gestiones necesarias para que ley se implemente definitivamente. Pero hasta el momento no recibieron respuestas concretas. Además el titular de Federcitrus consideró que la legislación debe ponerse en marcha porque es un alivio para los productores y ayudaría a contrarrestar la falta de inversión estatal en el sector.

“Existe una sobre carga impositiva para los cítricos y no se pueden celebrar acuerdos de libre comercio con el mundo. Eso hace que tengamos que pagar impuestos muy altos cuando exportamos y repercute directamente en la rentabilidad. La emergencia es una herramienta fundamental para que los productores puedan hacerse un lugar en las góndolas del mundo”, concluyó Carbonell.

 

Fuente: revistainternos.com.ar

2021-04-07T11:21:37-03:00

Nuevos competidores y trabas financieras para los cítricos nacionales

En nuestro país comenzó la cosecha de cítricos y aparecieron algunos problemas. Entre ellos la existencia de nuevos competidores a nivel mundial.

Argentina en los meses de febrero y marzo suele importar naranjas desde España por razones estacionales y con el objetivo de completar la demanda, en ese momento abastecida con la reserva de fruta conservada en cámaras de frío. La fruta europea es de gran calidad y, hasta que se cosecha la totalidad de naranjas argentinas, ocupa las góndolas a precios más elevados. Esto último hace que los productos nacionales continúen siendo competitivos en el país.

Sin embargo, hace unos años la presencia de nuevos países exportadores con productos a precios bajos se convirtió en una preocupación para los citrícolas locales. Egipto, por ejemplo, es uno de los que enciende las alertas de las frutas argentinas porque en solo tres años se convirtió en el primer exportador mundial de naranjas frescas.

“Egipto es un competidor bravísimo y está desplazando a otros productores. No se sabe bien por qué razón tienen los precios tan bajos, pero lo que sí se sabe es que operan en condiciones que son desfavorables para los productores nacionales. Este año fueron muy pocas las cantidades que se importaron y ya no se permiten más. Pero es un mercado para tenerlo en observación porque tiene precios muy bajos. Esto de cara al futuro puede ser un problema para Argentina”, explicó a InterNos José Carbonell, presidente de Federcitrus.

A la presencia de nuevos competidores se le suma la realidad nacional. Según los citrícolas, la producción de naranjas en el país disminuyó de manera considerable en el ultimo tiempo a causa de la falta de inversión, por el quiebre de muchas empresas y por cuestiones climáticas. Pero este no es un hecho que se dé solo en la cadena de cítricos dulces. De acuerdo a lo que manifestó Carbonell, las últimas estadísticas comerciales mostraron que Argentina redujo en los últimos diez años al 50% sus volúmenes exportables de frutas en general.

“Son una suma de factores los que hacen que la competitividad se complique. Para poder exportar uno tiene que contar con buenos años climáticos que garanticen volúmenes y calidad, una enorme búsqueda de mercados e incentivo gubernamental. La falta de rentabilidad llevó a que muchos productores dejaran el sector y eso tampoco colabora. En ese marco aparecen competidores con mejores precios y buenas calidades que amenazan a nuestras frutas”, aseguró Carbonell.

Los eventos climáticos de este año fueron quizás una de las variables que más condicionaron la producción citrícola porque Argentina atravesó un 2020 con mucha sequía, lo que hizo que los volúmenes de frutas se modificaran. Si bien para los cítricos dulces se estima una cosecha 2021 similar a la del año pasado, los limones no contarán con la misma suerte. Provincias como Tucumán y Salta que atravesaron grandes heladas y una sequía que se extendió hasta fin de año tendrán consecuencias en las cantidades producidas. Pero como contrapartida, proyectan una mejor calidad de fruta.

Emergencia citrícola

La Ley de Emergencia Citrícola Nº 27.507 entró en vigencia en 2019 para las provincias de Entre Ríos, Misiones, Jujuy y Salta. La misma, benefició en términos impositivos a una gran cantidad de productores nacionales. En octubre de 2020, en medio de la pandemia, el Congreso Nacional sancionó la Ley 27.569 como prórroga de la anterior. Esta, se extendería por un año y alcanzaría también a las provincias de Buenos Aires, Tucumán y Catamarca.

Sin embargo, la última extensión nunca se reglamentó oficialmente y los productores citrícolas hasta el momento no pueden acceder a la reducción y postergación de sus aportes patronales. Para empresarios y productores esto representa un gran obstáculo debido a las importantes sumas de dinero que invierten en cada temporada y los pagos que deberán enfrentar en el caso de que la normativa no se efectivice.

Según informó José Carbonell, desde el sector están llevando a cabo las gestiones necesarias para que ley se implemente definitivamente. Pero hasta el momento no recibieron respuestas concretas. Además el titular de Federcitrus consideró que la legislación debe ponerse en marcha porque es un alivio para los productores y ayudaría a contrarrestar la falta de inversión estatal en el sector.

“Existe una sobre carga impositiva para los cítricos y no se pueden celebrar acuerdos de libre comercio con el mundo. Eso hace que tengamos que pagar impuestos muy altos cuando exportamos y repercute directamente en la rentabilidad. La emergencia es una herramienta fundamental para que los productores puedan hacerse un lugar en las góndolas del mundo”, concluyó Carbonell.

 

Fuente: revistainternos.com.ar

2021-04-07T11:21:37-03:00
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