Si bien la enfermedad del HLB es letal para la producción citrícola, afortunadamente contamos con formas de prevenir sus irremediables efectos. En éste artículo te los mostramos.
La producción de plantas cítricas se realiza en invernáculos habilitados, cuyo proceso es fiscalizado por el INASE y el Senasa.
Este proceso de fiscalización, garantiza la sanidad de las plantas adquiridas, las cuales se encuentran libres de HLB y otras enfermedades
Además de adquirir cítricos certificados, según Resolución 27/2019, el DTV-e debe ser conservado 3 años para demostrar su origen.
El monitoreo visual de brotes por parte del productor, permite detectar la presencia de adultos, huevos y ninfas del vector de la enfermedad. Esta metodología es de bajo costo y de evolución rápida.
La frecuencia recomendada es quincenal en los meses de calor, y mensual en otoño e invierno. Se recomienda comenzar desde la periferia o bordes de la plantación hacia el centro.
Como adicional, y según las áreas, pueden colocarse trampas amarillas instaladas en la parte media de la copa de los árboles. Se trata de un monitoreo con trampas pegajosas en las cuales los insectos adultos de esta plaga, atraídos por el color amarillo, quedan adheridos.
Si vas a comprar plantas, asegurate que estén certificadas en viveros inscriptos en Senasa e INASE. Si viajas, no debés ingresar plantas ni fruta de países limítrofes sin autorización oficial, y tampoco debés comprar plantas en viveros informales o sin habilitación.